COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Martínez de Quintana, Altea 1; Carrasco Méndez, Clara Adela 1; Giménez López, Elena 1; Gómez López, Eliot 2; Martínez de Quintana, Elena 3; Fernández Fernández, Pedro Vicente 4
CENTROS
1. Servicio: Neurofisiología Clínica. Hospital General Universitario Reina Sofía; 2. Servicio de Neurología. Hospital General Universitario Reina Sofía; 3. Servicio: Medicina Familiar. Centro de Salud Callosa de Segura; 4. Servicio: Cirugía General. Hospital General Universitario Reina Sofía
OBJETIVOS
La inguinodinia es una complicación relativamente frecuente e infradiagnosticada de los procedimientos quirúrgicos, constituyendo un reto por el difícil manejo y diagnóstico que supone. Los nervios más frecuentemente lesionados son el ilioinguinal de forma global, el iliohipogástrico y genitocrural en cirugías abiertas, y las ramas del femorocutáneo en cirugía laparoscópica. El objetivo de este caso es dar a conocer la electromiografía como herramienta para identificar el nervio afectado con el fin de dirigir el tratamiento.
MATERIAL Y MÉTODOS
Paciente intervenido de hernia inguinal izquierda que presenta desde la intervención dolor en región pericicatricial irradiado a testículo y cara superointerna del muslo. En la exploración presentaba disestesias, con zonas de hipo/anestesia e hiperestesia/alodinia, dolor a la palpación en hipogastrio y con la flexión de cadera. Precisa manejo por unidad del dolor.
RESULTADOS
Se realizó una electromiografía, en la que se observaron potenciales de unidad motora de morfología polifásica en el músculo transverso del abdomen izquierdo, siendo diagnosticado de neuropatía de nervio ilioinguinal izquierdo. No fue posible diferenciar entre la afectación del nervio iliohipogástrico e ilioinguinal, puesto que discurren de forma paralela e inervan la misma musculatura, aunque la clínica y la exploración física fue más orientativa de una lesión del nervio ilioinguinal. (imagen)
CONCLUSIONES
Es importante sospechar la afectación de los nervios iliohipogástrico e ilioinguinal, en pacientes con inguinodinia tras una cirugía, con el fin de diagnosticar el origen y dirigir el tratamiento mediante técnicas como bloqueos nerviosos, neuroablación, neuromodulación o cirugía, evitando así la limitación que puede llegar a producir el dolor.