COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Fernández-Fournier Fernández, Mireya 1; de Lorenzo , Inigo 2; González García, Sofia 3; Nozal , Pilar 4; Lacruz Ballester, Laura 1; Rodríguez de Rivera, Francisco Javier 5; Puertas Muñoz, Inmaculada 1; Otero Ortega, Laura 6; Tallón-Barranco , Antonio 1; Díez Tejedor, Exuperio 5; Frank García, Ana 5
CENTROS
1. Unidad de Neuroinmunología Clínica y Esclerosis Múltiple. Servicio de Neurología. Hospital Universitario La Paz. Instituto de Investigación IdIPAZ. Universidad Autónoma de Madrid; 2. Servicio de Neurología. Hospital Universitario La Paz; 3. Servicio de Neurología. Universidad Autónoma de Madrid; 4. Servicio: Inmunología. Hospital Universitario La Paz; 5. Servicio de Neurología. Hospital Universitario La Paz. Instituto de Investigación IdIPAZ. Universidad Autónoma de Madrid; 6. Servicio: IdiPAZ. Hospital Universitario La Paz. Instituto de Investigación IdIPAZ. Universidad Autónoma de Madrid
OBJETIVOS
Estudiar las manifestaciones de enfermedad neurológica mediada por anticuerpos contra proteínas intraneuronales (Ac.Int) y anticuerpos de superficie (Ac.Sup). Analizar el coste asociado a estas determinaciones en la práctica clínica.
MATERIAL Y MÉTODOS
Estudio descriptivo, retrospectivo, unicéntrico analizando las determinaciones de AcInt o AcSup realizadas (ene2010-dic2019) y su evolución histórica. Análisis de características clínicas de casos seropositivos (antecedentes, presentación sindrómica, diagnóstico, tratamiento). Estudio del coste y demora diagnóstica.
RESULTADOS
Se estudiaron 666 pacientes con un total de 924 determinaciones (680 de AC.Int y 244 AC.Sup). Sólo un 5,9% pacientes (n=39) tenían anticuerpos (70,2% mujeres, edad media 53,5 años). El 41,0% de los casos presentó síntomas de disfunción encefálica, un 28,2% clínica del sistema nervioso periférico y un 12,8% síndrome cerebeloso. El grupo más frecuente de anticuerpos encontrados fueron los Ac.Int (71,8%), mayoritariamente anti-Hu y anti-ZIC4, pero el anticuerpo más frecuentemente encontrado (20,5%) fue el anti-NMDA. El intervalo entre el inicio sintomático y la detección de anticuerpo fue de 6,1 años disminuyendo en 2016-2019 a 1,6 años. Se utilizaron en total 53.800euros.
CONCLUSIONES
La sospecha de enfermedad mediada por anticuerpos antineuronales, y la solicitud de los mismos, es muy frecuente en la asistencia a pacientes neurológicos. Sería conveniente mejorar la selección de los casos a los que pedir estas pruebas.