COMUNICACIÓN ORAL | 20 noviembre 2024, miércoles | Hora: 17:30
AUTORES
Gifreu Fraixinó, Ariadna 1; Fonseca Hernández, Elena 2; Quintana Luque, Manuel 2; Lallana Serrano, Sofia 2; Campos Fernández, Daniel 2; Abraira Del Fresno, Laura 2; Santamarina Pérez, Estevo 2; Toledo Argany, Manuel 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hosp. Universitari Dr. Josep Trueta de Girona; 2. Servicio de Neurología. Hospital Universitari Vall d'Hebron
OBJETIVOS
La consulta de alta resolución de epilepsia (CARE) permite una atención especializada por un epileptólogo y la realización de un electroencefalograma (EEG) precoz. Nuestro objetivo es describir la utilidad clínica y eficiencia de una CARE en el manejo de pacientes tras una primera crisis epiléptica.
MATERIAL Y MÉTODOS
Estudio observacional prospectivo de casos y controles que incluye pacientes con sospecha de primera crisis visitados en la CARE durante un periodo de 12 meses y seguimiento de un año. Los grupos control incluyen pacientes con primeras crisis visitados en la consulta convencional y pacientes que ingresaron en Neurología para completar el estudio.
RESULTADOS
Se incluyeron 61 pacientes: 25 casos, 25 controles ambulatorios y 11 controles hospitalizados (edad 46,1 años; 42,6% mujeres). El tiempo de espera para el EEG fue menor en la CARE (10 vs 189 días; p<0,001). No hubo diferencias significativas entre grupos en el control de crisis. En la CARE, los cambios en el diagnóstico se produjeron de forma más precoz (94,5% vs 42,8% en los primeros 3 meses; p=0,002), permitiendo el alta más temprana en los que se descartó el diagnóstico de epilepsia. El coste anual en la CARE fue menor que los controles hospitalizados (media 1.742€ vs 11.961€; p<0,001), y menor que los controles ambulatorios en pacientes sin diagnóstico final de epilepsia (798€ vs 1.330€; p=0,032).
CONCLUSIONES
La CARE permite mejorar el rendimiento diagnóstico en pacientes con primeras crisis epilépticas sin repercutir en el control de crisis, reduciendo costes respecto a la hospitalización y especialmente en pacientes con baja probabilidad de epilepsia.