COMUNICACIÓN ORAL | 22 noviembre 2024, viernes | Hora: 15:30
AUTORES
Rodado Mieles, Samjie Andrea 1; Martin Alvarez, Rocio 1; Ortega Suero, Gloria 1; Pacheco Jímenez, Marta 1; Moreno Gambín, Maria Isabel 2; Velayos Galan, Alberto 1; Millán Pascual, Jorge 3; García Jiménez, Mercedes 1; Calvo Alzola, Marcos 1; Araque Arroyo, Patricia 4; Proy Vega, Beatriz 4; Lopez Sanchez, Piedad 5; Domingo Santos, Angela 1
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Complejo Hospitalario La Mancha Centro M.I.; 2. Servicio de Neurología. Hospital General de Tomelloso; 3. Servicio de Neurología. Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca; 4. Sin Servicio. Complejo Hospitalario La Mancha Centro M.I.; 5. Sin Servicio. Hospital General de Tomelloso
OBJETIVOS
En la última década se ha producido una avalancha de nuevas terapias modificadoras (TME) de la esclerosis múltiple (EM) que nos permiten personalizar cada vez más el tratamiento de los pacientes. Además, diversos estudios avalan el beneficio del inicio precoz de tratamiento así como el uso de terapias de alta eficacia desde el inicio en pacientes con debut agresivo de la enfermedad.
MATERIAL Y MÉTODOS
Estudio retrospectivo de todos los pacientes con EM que iniciaron tratamiento entre los años 2012 y 2023, agrupados en 3 periodos temporales (Grupo 1-G1- 2012-2015; Grupo 2-G2- 2016-2019; Grupo 3-G3- 2020-2023), en la consulta monográfica de Neuroinmunología de dos hospitales comarcales.
RESULTADOS
Obtuvimos 158 pacientes, 61,4% mujeres. Mediana de tiempo de evolución de la enfermedad (años) hasta el inicio del primer TME fue: G1 (4); G2 (2); G3 (0,5). Primer TME iniciado por nuestros pacientes fue (tratamientos plataforma / orales / monoclonales, en %): G1 (77,4 / 17 / 5,7); G2 (43,1 / 40/ 15,4); G3 (12,5/ 32,5/ 55).
CONCLUSIONES
En los últimos 12 años se observa una clara tendencia hacia una reducción del uso de los fármacos plataforma (interferones y glatirámero) como primera opción terapéutica, en favor de fármacos orales, efectivos y más cómodos para muchos pacientes, y fundamentalmente de fármacos monoclonales que han demostrado un control más rápido de la actividad de la enfermedad en pacientes de inicio agresivo. Además, la indicación de ocrelizumab en formas primariamente progresivas activas aumenta también el uso de dicho fármaco en pacientes naive.