COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Riva Amarante, Elena; Alvarez Linera, Juan; Rodríguez López, Alberto ; Perez Parra Perez Parra, Fernando; Franch Ubia, Oriol
CENTROS
Servicio de Neurología. Hospital Ruber Internacional
OBJETIVOS
El infarto migrañoso es una entidad infrecuente, que suele afectar a mujeres jóvenes. El mecanismo fisiopatológico es desconocido y la localización más habitual es el territorio posterior.
MATERIAL Y MÉTODOS
Descripción de un caso.
RESULTADOS
Varón de 72 años, con antecedentes de intolerancia a lamotrigina, migraña con aura, prótesis valvular aórtica biológica e insuficiencia venosa crónica, en tratamiento con Adiro 100 mg. Acude a consulta por alteración visual persistente de una semana de evolución. Comenzó con visión de imagen centelleante en zig-zag, localizada hemicampo derecho, de inicio progresivo, similar a sus auras habituales, seguido de cefalea hemicraneal leve que cedió en horas con Naproxeno. Desde su inicio persiste el déficit visual sin cambios. En los últimos meses ha tenido 3-4 ataques de migraña al mes, que ceden con Naproxeno sódico. La exploración neurológica y la campimetría fueron normales. Una RM craneal mostró un infarto subagudo en lóbulo occipital izquierdo. Se realizaron análisis de sangre incluidos anticuerpos antifosfolipídicos, angio-RM de troncos supraaórticos y cerebral, ECG, ecocardiograma, Holter ECG y shunt derecha-izquierda mediante dúplex transcraneal, sin alteraciones significativas. El cuadro clínico y los hallazgos de los estudios complementarios son compatibles con un infarto migrañoso. Se inicia tratamiento con zonisamida 50 mg y atorvastatina 20 mg al día, manteniendo el Adiro 100 mg. Revisado a los 3 meses, no había tenido ningún ataque de migraña, pero persistía la alteración visual.
CONCLUSIONES
Aunque el infarto migrañoso es más frecuente en jóvenes, se debe considerar en el diagnóstico diferencial de ictus en pacientes de edad avanzada, con antecedente de migraña.