COMUNICACIÓN ORAL | 22 noviembre 2013, viernes | Hora: 16:00
AUTORES
Gómez González, Alejandra 1; Vivanco Hidalgo, Rosa Maria 2; Ois Santiago, Angel Javier 1; Giralt Steinhauer, Eva 1; Ley Nacher, Miguel 2; Rocamora Zúñiga, Rodrigo Alberto 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital del Mar; 2. Unidad de Epilepsia, Neurología. Hospital del Mar
OBJETIVOS
Presentar un estudio descriptivo sobre las características principales de los pacientes con crisis epilépticas remitidos a Urgencias de nuestro centro como Código Ictus. El objetivo principal es destacar las diferencias semiológicas en UCIAS de estas patologías.
MATERIAL Y MÉTODOS
Del registro de Códigos Ictus (BASICMAR) desde enero 2005 a enero 2013, se obtuvieron 38 casos de etiología epiléptica primaria o secundaria. Se registraron los datos epidemiológicas, comorbilidades, NIHSS inicial, nivel de consciencia, resultados de neuroimagen y EEG, orientación diagnóstica inicial, presencia de parálisis de TODD y de afasia aislada, tiempo de recuperación, Rankin al alta, entre otros y se compararon con los pacientes de etiología vascular.
RESULTADOS
Los pacientes con crisis epilépticas registrados inicialmente como Código mostraron menor edad y menor prevalencia de factores de riesgo cardiovasculares. Los pacientes que presentaron déficit motor secundario a parálisis de Todd y aquellos con síndrome motor puro secundario a ictus lacunar se diferenciaron en el tiempo de recuperación desde la evaluación inicial en Urgencias. El TAC inicial no mostró resultados específicos que discriminara entre etiologías, excepto los casos de crisis convulsivas secundarias a lesiones intracraneales. La evolución clínica durante el ingreso hospitalario fue variable. El Rankin al alta fue mejor en los pacientes con crisis epilépticas.
CONCLUSIONES
Los pacientes remitidos como código ictus y que presentan déficit motor puro, afasia aislada o disminución del estado de consciencia representan un reto diagnóstico importante. Conocer las diferencias semiológicas entre ambas patologías, orientará al médico residente a tomar una mejor decisión diagnóstica-terapéutica y posiblemente a mejorar el pronóstico del paciente.