COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Vega Villar, Juan
CENTROS
Servicio de Neurología. Hospital Universitario Central de Asturias
OBJETIVOS
Presentamos el caso de un paciente de 50 años con una cefalea en racimos crónica que se inicia coincidiendo con el debut clínico de una esclerosis múltiple primaria progresiva. Tras fracasar múltiples tratamientos médicos abrotivos y preventivos se decide colocar un estimulador en el hipotálamo posterior.
MATERIAL Y MÉTODOS
El cuadro cumple criterios de la IHS de cefalea en racimos crónica (3.1.2.) y de esclerosis múltiple primaria progresiva según la revisión de 2005 de los criterios de McDonald. El electrodo se colocó en el hipotálamo posterior del lado sintomático (el derecho).
RESULTADOS
Un mes después de la colocación del estimulador presenta una marcada mejoría con disminución de la frecuencia e intensidad de las crisis, pasando de 7 crisis diarias a 3-4, que ahora alcanzan un alivio completo con AINES, manteniéndose verapamilo como único tratamiento preventivo.
CONCLUSIONES
La asociación entre cefalea en racimos y esclerosis múltiple sólo está descrita en 3 publicaciones de la literatura médica. La presencia de lesiones desmielinizantes troncoencefálicas hace pensar en una posible afectación del sistema trigémino autonómico secundaria a la esclerosis múltiple. La estimulación cerebral profunda puede ser un tratamiento eficaz en la cefalea en racimos resistente a tratamiento médico, incluso en casos en los que se sospecha un origen secundario de esta cefalea.