COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Sifontes Valladares, Walter Roger 1; Martín Prieto, Jon 1; Agirre Beitia, Garazi 1; Cabral Martínez, Laura 1; Moreno Estébanez, Ana 1; Díaz Cuervo, Irene 1; González-Pinto González, Tirso 2; Boyero Durán, Sabas 1; Mendibe Bilbao, Mar 1; Rodríguez-Antigüedad Zarrantz, Alfredo 1
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Universitario de Cruces; 2. Servicio de Neurología. Hospital Galdakao-Usansolo
OBJETIVOS
El espectro clínico de las encefalitis autoinmunes se va ampliando progresivamente por lo que consideramos importante actualizar nuevas formas de presentación clínica de esta entidad.
MATERIAL Y MÉTODOS
Descripción de 2 casos de encefalitis autoinmunes por anticuerpos anti-LGI1.
RESULTADOS
Caso 1. Mujer de 55 años que presenta un cuadro de confusión mental y crisis distónicas cervico-braquiales derechas. RM cerebral normal. V-EEG con ondas theta en región temporal izquierda, sin correlación con los episodios. Tratada con IVIG y rituximab de mantenimiento. Sin nuevos episodios de crisis y mejoria de trastorno cognitivo. Caso 2. Mujer de 47 años que consulta por lagunas mnesicas, trastorno del sueño y crisis distónicas crurales derechas de segundos de duración, con una frecuencia de hasta 40 episodios/día. RM cerebral normal. RM a los 6 meses pérdida de volumen de la cabeza de hipocampo izquierdo. V-EEG con crisis focal temporal izquierda de 20 seg sin expresión clínica. Tratada con IVIG, pulsos de metilprednisolona e inmunosupresión de mantenimiento con azatioprina. Con recuperación del trastorno mnésico y crisis distónicas. Ambos casos con LCR normal y Ac-antineuronales de superficie negativos. Ac-LGI1 positivo en suero a título 1/200 por inmunofluorescencia indirecta.
CONCLUSIONES
La encefalitis anti-LGI1 es una entidad potencialmente grave, cuyo pronóstico puede mejorar con el diagnóstico precoz y el tratamiento inmunosupresor temprano. Aunque en la mayoría de casos las crisis distónicas son faciobraquiales, pueden afectar también a región cervical y a extremidades inferiores. Por tanto, ante crisis distónicas que afecten a cualquier extremidad debe sospecharse esta entidad, especialmente si no presentan correlato electrofisiológico.