COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
González Manero, Ana Maria 1; Peinado Postigo, Felix 2; Martin Álvarez, Rocio 2; Rodado Mieles, Samjie 2; Resa Serrano, Elena 3; Botia Paniagua, Enrique 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Complejo Hospitalario La Mancha Centro. Hospital de Tomelloso; 2. Servicio de Neurología. Hospital General La Mancha Centro; 3. Servicio: Pediatría. Hospital General La Mancha Centro
OBJETIVOS
El síndrome de Guillain-Barré es una polirradiculoneuropatía aguda de difícil diagnóstico en la infancia, sobre todo por la frecuente inespecificidad y heterogenicidad de las primeras manifestaciones (dolores musculares, cojera, irritabilidad o somnolencia pueden ser síntomas iniciales).
MATERIAL Y MÉTODOS
Presentamos el caso de un niño de 28 meses llevado a Urgencias por episodio de 2 días de dolor en MMII y rechazo de deambulación. Afebril, no cuadro catarral. Rx y ecografía de caderas anodinas. Analítica con CPK anodina y PCR negativa. Respuesta parcial con analgesia. Vuelve a urgencias porque el dolor interrumpe el sueño, se presenta ya en reposo y empeora con sedestación. La madre refiere alteración en el tono de voz, somnolencia y gatroenteritis(GEA) una semana antes. A la exploración destacan ROTs abolidos, rechaza la marcha y sensibilidad distal MMII disminuida.
RESULTADOS
TC craneal urgente y RM medular completa sin hallazgos patológicos. VEB Ig M+, Ig G+. PCR exudado faríngeo:+enterovirus y rinovirus. LCR: Disociación albúmino-citológica. EMG: Polirradiculoneuropatía sensitivo-motora desmielinizante con afectación de MMSS YMMII. Tratamiento con Igs I.V.(0,4mg/Kg/día, 5 días) con mejoría progresiva. Al alta cierta inestabilidad de cintura pelviana y nota “hormigas” en brazos. Excelente evolución clínica hasta la recuperación completa.
CONCLUSIONES
A menor edad pediátrica generalmente mayores dificultades diagnósticas se plantean. Ello obliga en muchas ocasiones a un amplio diagnóstico diferencial, minuciosa anamnesis y exploración neurológica y pruebas complementarias antes de alcanzar el diagnóstico definitivo. A pesar de la complejidad clínica y el frecuente retraso diagnóstico en las edades más tempranas, la evolución habitual de estos niños es hacia la recuperación completa.