COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Camarena Cepeda, Fabiola; Marin Cabañas, Martha; Perez Esteban, Raisa; Fernández Recio, Maria
CENTROS
Servicio de Neurología. Hospital Nuestra Señora de Valme
OBJETIVOS
Los déficits visuales transitorios son relativamente frecuentes y pueden presentarse desde la juventud hasta edades avanzadas. En muchos de estos episodios son debidos a una migraña con aura y que usualmente, pero no siempre, se asocia con cefalea. Sin embargo, en la presentación tardía nos hace preguntarnos: ¿Es necesario realizar pruebas complementarias?
MATERIAL Y MÉTODOS
Describir el caso de un varón de 70 años de edad con múltiples factores de riesgo cardiovascular y sin antecedentes de migraña. Que asiste a nuestra consulta por presentar varios episodios paroxísticos transitorios de unos 2-3 min de duración, consistentes en fosfenos parpadeantes rojizos que progresaba del centro del campo visual a la izquierda y desaparecían de forma progresiva. No cefalea posterior ni otro síntoma neurológico.
RESULTADOS
Se realizaron varias pruebas incluyendo: VSG, ecodoppler de TSA y TC, RMN de cráneo, EEG, Holtter y ecocardiograma, que fueron normales. Los síntomas fueron mejorando progresivamente en frecuencia hasta desaparecer completamente en varios días. Actualmente está asintomático.
CONCLUSIONES
La migraña con aura usualmente realiza su debut antes de los 40 años de edad. En caso de presentarse por encima de estas edades, la IHS la define como Late Onset Migraine Accompaiment (LOMA). Esta patología está presente hasta en el 0.7% de la población. Creemos conveniente que por la edad estamos obligados a realizar estudios que descarten otras causas secundarias: arteritis de la temporal, epilepsia, macroadenoma de las pituitaria, AIT y accidentes vasculares cerebrales. El tratamiento es igual que para la migraña con aura con las precauciones convenientes por la edad del paciente.