COMUNICACIÓN ORAL | 18 noviembre 2014, martes | Hora: 15:30
AUTORES
Gonzalo Benito, Hugo 1; Nogueras Penabad, Lara 1; Gil Sanchez, Anna 1; Naudí Farré, Alba 2; Cabré Cucó, Rosanna 2; Saez Calero, Nuria 1; Solana Moga, M Jose 1; Gonzalez Mingot, Cristina 1; Lecina Monje, Jorge 1; Pamplona Gras, Reinald 2; Portero Otin, Manel 2; Brieva Ruiz, Luis 1
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Universitari Arnau de Vilanova de Lleida; 2. Servicio: Medicina Experimental. IRB-Lleida
OBJETIVOS
La desmielinización es una característica que define la EM. La mielina se compone principalmente de una bicapa lipídica cuyos cambios se reflejan en el líquido cefalorraquídeo (LCR). El objetivo de este trabajo es determinar si la susceptibilidad de la mielina, estimada por el perfil lipídico (LP) del LCR, correlaciona con la evolución clínica de la EM.
MATERIAL Y MÉTODOS
Presentamos un estudio retrospectivo en el que hemos analizando el perfil lipídico del LCR de 100 pacientes al inicio de la enfermedad, mediante cromatografía de gases y espectrometría de masas. Las muestras se distribuyeron en 18 grupos dependiendo de la agresividad clínica demostrada después de, al menos, 5 años de evolución.
RESULTADOS
Los resultados demuestran diferencias significativas en el LP del LCR dependientes de la agresividad. Por un lado, los pacientes que presentaron un incremento de ácidos grasos saturados (SFA) en su LP (p<0,021), particularmente ácidos mirístico y palmítico, siguieron un curso leve de la enfermedad. Por otro lado, el LP de pacientes que siguieron un curso agresivo era rico en ácidos grasos poliinsaturados (PUFA), especialmente los monoinsaturados (p < 0,004), aunque no se demostraron cambios significativos en el ácido docosahexanoico, ácido eicosapentenoico ni ácido ecosatrienoico.
CONCLUSIONES
Teniendo en cuenta que los PUFA son más susceptibles que los SFA y que su abundancia relativa en la mielina correlaciona con el curso clínico de la enfermedad, podemos concluir que el LP del LCR en el momento diagnóstico puede ser utilizado como predictivo del grado de agresividad de evolución en la EM y por extensión de enfermedades desmielinizantes.