COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Adell Ortega, Vanesa 1; Vélez Santamaria, Patricia Valentina 2; Arroyo Pereiro, Pablo 2; Cano Sánchez, Luis Miguel 2; Martínez Yélamos, Antonio 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital de Viladecans; 2. Servicio de Neurología. Hospital Universitari de Bellvitge
OBJETIVOS
La ACG es una vasculitis que involucra arterias de mediano-grande tamaño, especialmente la arteria temporal. Las manifestaciones neurológicas ocurren en un 30%, apareciendo el ictus isquémico en 3-7%. Presentamos un caso de debut de ACG con infarto de AICA y signo del “halo” vertebral.
MATERIAL Y MÉTODOS
Varón de 75 años, con factores de riesgo cardiovascular y adenocarcinoma de pulmón actualmente libre de enfermedad. Consulta por cuadro progresivo de un mes de alteración del habla y de la marcha, hipoacusia de oído derecho, con dolor proximal de miembros inferiores, pero sin cefalea, claudicación mandibular, pérdida de visión ni síndrome tóxico asociados. Ingresa para estudio.
RESULTADOS
El TC craneal muestra infarto en territorio AICA derecho. Analíticamente, destacan VSG y hemograma normal con PCR discretamente elevada. En ecodopplerTSA se objetiva engrosamiento de la pared de ambas arterias vertebrales, simétrico a lo largo de la luz de ambos vasos (signo del halo), sugestivo de arteritis. No ateromatosis en carótidas. En doppler de arterias temporales, signo del halo en lado derecho. No alteraciones en ECG ni ecocardiograma. Se realiza fondo de ojo que es normal. Ante la sospecha clínica y los hallazgos ultrasonográficos, se realiza biopsia de la arteria temporal afecta, confirmándose el diagnóstico de ACG. Se inicia tratamiento con prednisona (1 mg/kg), con mejoría del dolor.
CONCLUSIONES
El signo del halo en arteria vertebral debe hacer sospechar ACG, especialmente si se acompaña de otros signos y síntomas. Su hallazgo apoya la ACG como causa de ictus en territorio vertebrobasilar, sobretodo si no se encuentran otras causas.