COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Sesar Ignacio, Angel 1; Rivas López, Maria Teresa 2; Ares Pensado, Begona 3; Prieto González, Angel 4
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela; 2. Servicio de Neurología. Complexo Hospitalario Universitario A Coruña; 3. Servicio de Neurología. Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela; 4. Servicio de Neurocirugía. Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela
OBJETIVOS
El schwannoma es un tumor benigno de los troncos nerviosos periféricos derivado histológicamente de las células de Schwann. Cuando es de gran tamaño puede dar clínica por la compresión de estructuras del tronco del encéfalo.
MATERIAL Y MÉTODOS
Mujer de 70 años, sin antecedentes personales de interés, que en Mayo de 2013 comenzó con un cuadro de inicio progresivo de dificultad y torpeza para caminar con tendencia a caerse. 3 meses después la marcha era imposible. Se quejaba además de dificultad para retener la orina. No refería alteraciones sensitivas, cefalea ni vómitos. En la exploración física se apreció moderada hipoacusia bilateral, paraparesia 3/5 con tono normal, reflejos hipoactivos, signo de Babinski bilateral, sensibilidad superficial y profunda conservadas, ligera dismetría bilateral, muy inestable en la sedestación y ortostatismo. La RM cerebral mostró una masa extraaxial hipercaptante, de morfología redondeada y aspecto ligeramente heterogéneo, en el ángulo pontocerebeloso derecho que se introduce en conducto auditivo interno compatible con schwannoma del nervio vestibular con compresión del tronco cerebral hacia el lado izquierdo e hidrocefalia no comunicante secundaria con edema arreabsortivo.
RESULTADOS
Se realizó exéresis neuroquirúrgica y estudio anatómo-patológico que confirmó el diagnóstico. Se resolvió la paraparesia y la alteración urinaria. Como secuela tras la intervención, la paciente presenta una paresia facial e hipoacusia residual.
CONCLUSIONES
Los schwannomas son tumores benignos de lento crecimiento, por lo que se puede retrasar su diagnóstico hasta incluso años desde el comienzo de los síntomas.