COMUNICACIÓN ORAL | 18 noviembre 2015, miércoles | Hora: 18:00
AUTORES
Pytel ., Vanesa 1; Matías-Guiu Antem, Jordi 1; Cabrera Martín, Maria Nieves 2; Galán Dávila, Lucia 1; Moreno Ramos, Teresa 1; Valles Salgado, Maria 1; Vela Souto, Alvaro 1; Guerrero Sola, Antonio 1; Carreras Delgado, Jose Luis 2; Matías-Guiu Guía, Jorge 1
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Clínico San Carlos; 2. Servicio de Medicina Nuclear. Hospital Clínico San Carlos
OBJETIVOS
En la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) cada vez se describen con mayor frecuencia alteraciones cognitivas y conductuales. Estudios de autopsia han observado la presencia de depósito de beta-amiloide, desconociéndose el papel que puede desarrollar en el curso de la enfermedad. En nuestro conocimiento, no existen estudios con trazadores PET de amiloide en ELA, lo que permitiría su evaluación in vivo. Nuestro objetivo fue determinar la presencia de depósito de beta-amiloide en PET en una serie de pacientes con ELA.
MATERIAL Y MÉTODOS
Estudio prospectivo, de corte transversal. Se incluyeron 9 pacientes con diagnóstico de ELA definida o probable según criterios de El Escorial revisado. Se realizó examen neurológico, neuropsicológico, Amyotrophic Lateral Sclerosis Functional Rating Scale, resonancia magnética, FDG-PET así como PET-amiloide con el radiotrazador 18F-Florbetaben. Se efectuó un análisis visual por dos evaluadores expertos y cuantitativo.
RESULTADOS
Mediana de edad 47 años (rango intercuartílico 42.5-63), tiempo de evolución 19 meses (rango 13.5-41.5). En siete pacientes (77.7%) los resultados obtenidos fueron negativos para depósito de amiloide (score 1); en dos de los casos (22.2%) fueron positivos (score 2-3), evidenciando depósito de beta-amiloide.
CONCLUSIONES
La frecuencia de depósito de beta-amiloide fue baja, pero superior a la esperada en población sana de la misma edad. Esto sugiere la posibilidad de que el depósito de amiloide participe en la fisiopatología de la enfermedad, al menos en un subgrupo de pacientes. No obstante, son necesarios estudios con mayor tamaño muestral y seguimiento longitudinal para evaluar el papel de la beta-amiloide en el curso de la enfermedad.