COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Ramió Torrentà, Lluis 1; Robles Cedeño, Rene 2; Perkal , Hector 3
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Universitari Dr. Josep Trueta de Girona; 2. Servicio: Grup de Neurodegeneració i Neuroinflamació. Institut d'Investigació Biomèdica de Girona (IDIBGI); 3. Servicio: Grup de Neurodegeneració i Neuroinflamació. Institut d’Investigació Biomèdica de Girona (IDIBGI)
OBJETIVOS
Fingolimod es un fármaco oral para el tratamiento de la esclerosis múltiple remitente-recurrente (EMRR). Su eficacia ha sido confirmada en ensayos clínicos y también por muchos centros de todo el mundo que han reportado su experiencia con el fármaco. Aunque presenta una buena tolerancia, es necesario monitorizar sus efectos cardíacos durante la primera dosis, así como el contaje celular, perfil hepático y afectación oftálmica durante el seguimiento.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se describen los pacientes, los tratamientos previos a fingolimod, la eficacia y sus efectos secundarios.
RESULTADOS
19 pacientes recibieron fingolimod (12 mujeres), presentando una edad media de 38 años. Dos de ellos no habían tomando ningún tratamiento previo, mientras que 17 habían recibido interferón, acetato de glatirámero y/o natalizumab. La mayoría de pacientes (n=13) habían sido tratados con ≤ 2 tratamientos inmunomoduladores (TIM) y 4 con >2 TIM. 9 pacientes procedían de tratamiento con natalizumab. Los motivos del cambio de tratamiento fueron: 8/17 actividad de la enfermedad con TIM, 8/17 alto riesgo a leucoencefalopatía multifocal progresiva, y 1/17 la presencia de anticuerpos anti-natalizumab. Se registraron 6 brotes durante el tratamiento con fingolimod, uno de ellos debido al efecto rebote provocado por la interrupción de natalizumab, aún así el EDSS se mantuvo estable al inicio y durante el seguimiento con fingolimod. No se observaron efectos secundarios cardíacos, hepáticos ni oftálmicos. En dos ocasiones se observó linfopenia transitoria (<200 celulas/ml).
CONCLUSIONES
Nuestros datos avalan la eficacia y buena tolerancia de fingolimod en la práctica clínica diaria convirtiéndolo en un tratamiento a considerar para formas activas de EMRR.