COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Novo Ponte, Sabela; García Malo, Celia; Gómez-Porro Sánchez, Pablo; Contador Muñana, Jose Miguel; Mena Romo, Luis; Alba Alcántara, Lucia; Ruiz Molina, Angel; Velasco Calvo, Rocio
CENTROS
Servicio de Neurología. Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda
OBJETIVOS
Describir un caso de crisis oculógiras secundarias a intoxicación por carbamazepina, resuelta con la normalización de los niveles en sangre.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se presenta a un paciente de 58 años, diagnosticado a los 23 años de epilepsia sintomática (crisis focales y secundariamente generalizadas), secundaria a malformación arteriovenosa (MAV) gigante temporal tratada con embolizaciones múltiples. Seguía tratamiento con Topiramato (TPM), Carbamazepina (CBZ), Diacepam, Escitalopram, y Haloperidol. Ingresó recientemente por estatus epiléptico focal motor; se retiró Haloperidol y se añadió Levetiracetam. Ingresó en segunda ocasión por crisis en contexto de infección sistémica. Se inició Zonisamida, con descenso y retirada de TPM.
RESULTADOS
Acude una semana tras el alta hospitalaria, refiriendo episodios diarios de supraversión forzada de la mirada de varias horas de duración sin relación con crisis epilépticas. La imagen cerebral no muestra cambios respecto a las previas. Se realiza video-EEG durante un episodio sin correlato en el electroencefalograma. Los niveles de CBZ a su llegada son superiores al rango terapéutico. Durante el ingreso se disminuye dosis de CBZ, se normaliza el nivel terapéutico y ceden por completo los episodios referidos.
CONCLUSIONES
Se diagnostica de crisis oculógiras. Se trata de una reacción distónica aguda focal que se relaciona con frecuencia con fármacos antidopaminérgicos como los neurolépticos. Son escasas las referencias a la carbamazepina y su mecanismo de acción no está establecido. El desconocimiento de esta entidad puede conducir a error diagnóstico, confundiéndose con frecuencia con crisis epilépticas.