COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Cuerda Clares, Maria Teresa 1; Gómez Moreno, Isabel 2; Gómez Romero, Lourdes 2; Ramírez Luna, Julio Cesar 1; Vicente Rodrigo, Julio Alberto 1; Trapero Iglesias, Natacha 1; Nieto Rodriguez, Jose Antonio 1; Carod Artal, Francisco Javier 3
CENTROS
1. Servicio: Medicina Interna. Hospital General Virgen de la Luz; 2. Servicio de Neurología. Hospital General Virgen de la Luz; 3. Servicio de Neurología. Raigmore Hospital.
OBJETIVOS
Describir los hallazgos clínicos y analíticos de 15 pacientes que presentaron rabdomiolisis tras ejercicio físico repetitivo desde 2006 a 2016.
MATERIAL Y MÉTODOS
Análisis retrospectivo de 15 pacientes diagnosticados de rabdomiolisis post-ejercicio físico, no traumática, reseñándose las alteraciones clínicas y analíticas en sangre y orina.
RESULTADOS
Se incluyeron 15 pacientes. Edad media 27 años (rango 19-40). 8 (53%) fueron mujeres. 7 pacientes (47%) (todas mujeres) había realizado spinning. 4 varones (27%) estuvieron en el gimnasio realizando musculación. 10 realizaron el ejercicio durante una hora o menos (67%). En el 100% fue su primera sesión. 4 pacientes (30%) nos refirieron una escasa hidratación, 9 (70%) presuntamente la habían realizado correctamente. 3 (20%) presentaron patología tiroidea y otros 3 sobrepeso. El síntoma prevalente fueron las mialgias (93%), y el signo fue la coluria (67%). En 6 pacientes (40%) los síntomas se presentaron durante la 1ª hora post-ejercicio y presentaban al ingreso dolor y/o edema muscular. Solo 2 pacientes presentaban un sedimento de orina normal, en 11 se detectó hemoglobinuria. 2 pacientes presentaron aumento de creatinina (valor máximo 2,74). Media de CK inicial: 86.918 (rango 856-380.430). 5 pacientes (36%) presentaron un aumento progresivo de CK. Media de días de ingreso: 3. 100% fueron hidratados y evolucionaron favorablemente.
CONCLUSIONES
En nuestro medio este síndrome está asociado al spinning en mujeres y actividad de musculación / gimnasio en varones. En todos ellos sucedió en la primera sesión. Los niveles de CK se elevaron progresivamente en varios pacientes. Todos los casos evolucionaron favorablemente, incluso 2 pacientes que presentaron insuficiencia renal leve.