COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
de Antonio Rubio, Isabel
CENTROS
Servicio de Neurología. Hopital Val d'Ariege
OBJETIVOS
La principal utilidad del estudio neurosonológico (ENS) en patología vasculocerebral es la detección de estenosis u oclusiones arteriales en pacientes con ictus isquémico o AIT. Comparamos su rentabilidad ante dichos diagnósticos frente a otras causas de estudio en las que la hipótesis vascular isquémica es improbable.
MATERIAL Y MÉTODOS
Pacientes nuevos consecutivos estudiados en nuestro laboratorio en los meses febrero-abril de 2011, agrupados según que el motivo de la indicación fuese clínica isquémica cerebral (CIC, ictus isquémico o AIT) frente a otros motivos (OM). Se comparan las características epidemiológicas de ambos grupos, así como la frecuencia de hallazgos patológicos en el estudio (ateromatosis, estenosis u oclusiones arteriales cervicales o en polígono de Willis).
RESULTADOS
Se incluyeron 200 pacientes, 138 por CIC y 62 por OM (42% vs 61’3% mujeres, respectivamente, p=0’01). Los OM más frecuentes fueron síntomas neurológicos imprecisos (30’6%), auras migrañosas (14’5 %) y vértigos (14’5%). El grupo de CIC era mayor (65’96 vs 59’32 años, p=0’001), y tenía más tasa de HTA (65’9 vs 48’4 % p=0’02) y de DM (40’6 vs 16’1 %, p=0’01). Un 66’7 % de los estudios fue patológico en el grupo CIC vs 29’% en el OM (p<0’001): (ateromatosis 61`8 vs 29 %, moderada-severa 27’9 vs 3’2%, p<0’001; estenosis carotidea 13 vs 3’2%; severa/oclusión: 8 vs 0%; p=0’03; estenosis intracraneales 8’8 vs 0%; p=0’002).
CONCLUSIONES
La rentabilidad del ENS en pacientes estudiados con patología cerebrovascular improbable es baja, y los hallazgos en ese grupo no tienen repercusión clínica.