COMUNICACIÓN ORAL | 22 noviembre 2017, miércoles | Hora: 15:30
AUTORES
Perla Muedra, Carlos 1; Sánchez Roy, Rafael 2; Valero Merino, Caridad 2; Carreras Teixidor, Pilar 3; Esturi Navarro, Isabel 3; Marín Montiel, Juan 3
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Universitari Arnau de Vilanova de Lleida; 2. Servicio de Neurología. Hospital Arnau de Vilanova; 3. Servicio: Oftalmología. Hospital Arnau de Vilanova
OBJETIVOS
Presentación de la casuística de pacientes con síntomas neurooftalmológicos en un área sanitaria de 311.000 habitantes desde mayo de 2015 y valorar su utilidad asistencial y las carencias detectadas.
MATERIAL Y MÉTODOS
Revisión de todos los casos y elaboración de una base de datos prospectiva de pacientes con síntomas neurooftalmológicos en un área sanitaria recogiendo edad, sexo, motivo de atención, diagnóstico y profesional que lo atiende. RMN con cortes ultrafinos de tronco.
RESULTADOS
515 pacientes: 283 mujeres (55%, edad 16-88). Hombres 232 (45%, edad 15-93); síntomas más frecuentes: 1. alteración visión 240 pacientes (46'6%) (por orden de frecuencia neuropatía óptica (vascular e inflamatoria), aura de migraña, patología vascular cortical, patología no orgánica, patología oftalmológica). 2 Alteración de los movimientos oculares (diplopías) 173 pacientes (33'5%) por orden de frecuencia VI par, III par, fascículo longitudinal medial, IV par. 3. Ptosis (4'85%) 4. Alteración pupilar (4'27%) 5. Otras poco frecuentes controles en asintomáticos, dolor ocular, nistagmo, patología de órbita, extrapiramidal y miocimias.
CONCLUSIONES
La patología neurooftalmológica es una patología más frecuente, variada y compleja de lo sospechado, la comunicación interdisciplinar es imprescindible para llegar a un adecuado diagnóstico y es muy útil para los pacientes. La patología más frecuente ha sido la alteración de visión y diplopías (80%). Los cortes ultrafinos del tronco en RMN aumentan la frecuencia de ictus en detrimento a la microvascular. En nuestro medio se detectan carencias debido a la sobrecarga asistencial y así destacan los pocos controles visuales de fármacos potencialmente tóxicos y un bajo índice de sospecha de neuropatías ópticas hereditarias.