COMUNICACIÓN ORAL | 22 noviembre 2017, miércoles | Hora: 08:00
AUTORES
Gómez Mayordomo, Victor Antonio 1; Gómez Iglesias, Patricia 2; Mayo Canalejo, Diego 2; Silva Hernández, Lorenzo 2; González García, Nuria 2; Gómez-Escalonilla Escobar, Carlos Ignacio 2; Santos Bueso, Enrique 2; Porta Etessam, Jesus Mariano 3
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Clínica La Milagrosa; 2. Servicio de Neurología. Hospital Clínico San Carlos; 3. Servicio de Neurología. Hospital Clínico San Carlos. Universidad Complutense de Madrid.
OBJETIVOS
La arteritis de células gigantes o arteritis de la temporal (AT) es una vasculitis que afecta a vasos de grueso y mediano calibre, con predisposición por las arterias craneales. Las complicaciones neurológicas aparecen hasta en un 45% de los pacientes, siendo las más frecuentes las complicaciones neurooftalmológicas y menos frecuentes los ictus isquémicos.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se llevó a cabo un análisis retrospectivo de los pacientes ingresados entre 1997 y 2017 en el Servicio de Neurología de un hospital terciario que cumplían los criterios de la American College of Rheumatology para el diagnóstico de AT y que, además, presentaron complicaciones neurológicas. Se revisan el manejo terapéutico y evolución clínica posterior.
RESULTADOS
En el intervalo del estudio, 49 pacientes ingresaron con síndromes neurológicos secundarios a AT. Treinta y cuatro pacientes (69,3%) presentaron manifestaciones neurooftalmológicas, entre las que se incluyeron: 21 neuropatías ópticas isquémicas anteriores (NOIAs), 6 amaurosis fugax, 5 neuropatías oculomotoras, una oclusión de rama arterial retininana y una trombosis venosa retiniana. Los 15 pacientes restantes (30,7%) ingresaron por ictus isquémicos, cuya localización más frecuente fue el territorio posterior (12) y menos el territorio carotídeo (3).
CONCLUSIONES
Las complicaciones neurológicas más frecuentes en los pacientes con AT ingresados en nuestro servicio son las neurooftalmológicas, en especial las NOIAs, aunque la amaurosis fugax y las mononeuropatías craneales también suponen un porcentaje relevante de casos. Los ictus en pacientes con AT son poco frecuentes y tienen una preferencia por el territorio vertebrobasilar.