COMUNICACIÓN ORAL | 22 noviembre 2018, jueves | Hora: 15:30
AUTORES
Campoy Díaz, Sergio 1; Paipa Merchan, Andres 2; null, Raul 2; Vergés , Enric 2; Salioui , Abdeilahl 2; Barcelo , Maria Antonia 2; Virgili , Nuria 2; González Herrero, Belen 2; Nuñez Guillen, Ana 2; Gutiérrez , Mario 2; Moreno , Jose Luis 2; Povedano Panades, Monica 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital de Viladecans; 2. Servicio de Neurología. Hospital Universitari de Bellvitge
OBJETIVOS
La ELA varía en su progresión y supervivencia desde el inicio de los síntomas. El estado nutricional es un marcador pronóstico en el momento del diagnóstico. Describimos prospectivamente el estado nutricional de los pacientes evaluados en una unidad multidisciplinar en población española y su relación con la supervivencia.
MATERIAL Y MÉTODOS
Obtuvimos el peso premórbido, el IMC(índice de masa corporal) en la primera visita y en la visita sucesiva a seis meses de pacientes que cumplían criterios de El Escorial para ELA probable o definitiva. Otras variables pronósticas analizadas fueron el tipo de inicio, edad, estadío Kings, mutación C9orf72, capacidad vital forzada y uso de PEG(gastrostomía).
RESULTADOS
Evaluamos un total de 221 pacientes. El IMC medio fue de 25,5 Kg. 11 pacientes tenían un IMC inferior a 19 y 30 pacientes tenían uno superior a 30. Los pacientes bulbares tuvieron un peor pronóstico. La edad mayor a 60 años, la peor función respiratoria al diagnóstico y un estadío Kings avanzado también se relacionaron con una menor supervivencia. El tiempo de supervivencia fue mayor para los pacientes con sobrepeso comparado con aquellos obesos o con peso normal. La pérdida de peso superior al 10% se relacionó con un peor pronóstico. El efecto fue independiente del resto de variables. El uso de gastrostomía no modificó el tiempo de supervivencia independientemente del inicio bulbar o la pérdida de peso.
CONCLUSIONES
El IMC al diagnóstico y su evolución son marcadores pronósticos independientemente de otros marcadores. Intervenciones dirigidas a mejorar el estado nutricional pueden modificar la progresión de la enfermedad.