COMUNICACIÓN ORAL | 21 noviembre 2018, miércoles | Hora: 17:30
AUTORES
Molina Sánchez, Maria 1; Hernández González Monje, Mariana 2; Delgado Suarez, Celia 3; Gómez Iglesias, Patricia 3; Garcia Azorín, David 4; null, Monica 5; García Morales, Irene 3
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Rey Juan Carlos; 2. Servicio: Neurociencias. Hospital Sur; 3. Servicio de Neurología. Hospital Clínico San Carlos; 4. Servicio de Neurología. Hospital Clínico Universitario de Valladolid; 5. Servicio de Neurología. Hospital Ruber Internacional
OBJETIVOS
La disponibilidad de farmacos antiepilépticos (FAEs) difiere entre paises en vías de desarrollo y países desarrollados. En muchos de los primeros, como en Camerún, la cobertura farmacológica es escasa y limitada: carbamazepina, fenitoína, fenobarbital y ácido valcproico. A pesar de que otros FAEs como lamotrigina han sido incluidos en la lista de medicamentos esenciales de la OMS (2017), todavía no se encuentran disponibles en muchos de estos países.
MATERIAL Y MÉTODOS
Neurólogos de distintos centros españoles organizamos un curso intensivo de neurología en Yaundé, Camerún. En él investigamos la disponibilidad y el manejo de los distintos FAEs en el país, mediante de un cuestionario repartido a profesionales sanitarios.
RESULTADOS
De los 42 profesionales sanitarios encuestados, 88.1% afirmaban usar fármacos para tratar la epilepsia, sin embargo el 76.2% conocía la existencia de tres FAEs únicamente. Con respecto al manejo el 21% afirmaba usar Haloperidol, el 69% carbamazepina, el 73.8% ácido valproico, el 88.1% fenobarbital y el 35.7% fenitoína. La inmensa mayoría (92.9%) mantendrían los FAEs durante el embarazo, considerando buenas opciones: carbamazepina (38%), ácido valproico (33.4%), fenobarbital (38.2%), haloperidol (4.8%) y fenitoína (7.2%). Ninguno de los encuestados mencionó otros FAEs, incluída lamotrigina.
CONCLUSIONES
Aunque la mayoría de los profesionales sanitarios encuestados usarían fármacos para combatir la epilepsia, tan sólo unos pocos FAEs parecen estar disponibles. No todos mantendrían el tratamiento durante el embarazo ni conocen qué FAEs son los más adecuados. Los FAEs de nueva generación con menos efectos adversos no están disponibles