COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Valero López, Gabriel 1; Carreón Guarnizo, Ester 1; Moreno Arjona, Maria de la Paz 2; Hernandez Clares, Rocio 1; Baidez Guerrero, Ana Esther 1; Garcia Molina, Estefania 1; Alba Isasi, Maria Teresa 1; Vázquez Lorenzo, Julian 1; Morales De la Prida, Moises 1; Canovas Iniesta, Maria 1; Cabrera Maqueda, Jose Maria 1; Fuentes Rumi, Luna 1; Diaz Perez, Jose 1; León Hernandez, Adelaida 1; Iniesta Martinez, Francisca 2; Meca Lallana, Jose Eustasio 1; Morales Ortiz, Ana 1
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca; 2. Servicio: Neurociencias. Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca
OBJETIVOS
El síndrome radiológico aislado (RIS) no se considera un fenotipo de esclerosis múltiple (EM) pero si presentan un riesgo aumentando de convertir a EM tanto en formas remitentes-recurrentes (EMRR) como formas progresivas.
MATERIAL Y MÉTODOS
Realizamos un estudio observacional, retrospectivo y descriptivo de una muestra de 15 pacientes con diagnostico de RIS por criterios de Okuda los cuales fueron valorados en nuestra unidad de EM entre Enero de 2011 y Abril de 2019.
RESULTADOS
Un 80% de la muestra eran mujeres con una edad media de 30,67 años (DE-11,16). El tiempo medio de seguimiento de la muestra fue de 48,73 meses (DE-19,85). El motivo de solicitud de la RM más frecuente fue cefalea en un 66,7% de los casos. El 100% de los pacientes presentaban lesiones periventriculares. Seis pacientes (40%) presentaron progresión en las RM sucesivas. Diez pacientes (71,4%) presentaban bandas oligoclonales en liquido cefalorraquideo. La mitad convirtieron a EM. Un 33,3% convirtieron a EM con un tiempo medio hasta la conversión de 22,6 meses (DE-12,23). Todos los pacientes convirtieron en formas EMRR. En nuestra serie 7 pacientes recibieron tratamiento, cinco de ellos con Interferon. Tres pacientes convirtieron a EM a pesar del tratamiento.
CONCLUSIONES
Nuestra serie muestra una tasas de conversión a EM similar a lo publicado pero con una tasa de progresión en RM sucesivas inferior a lo publicado. Se necesitan nuevos estudios que homogeneicen el manejo clínico y ayuden a seleccionar a aquellos pacientes que se pueden beneficiar de recibir tratamiento.