COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Sánchez Álvarez, Jose Maria; Fernandez del Valle, Alvaro; Alvarez Escudero, Rocio; Castañón Apilánez, Maria; Ameijide Sanluis, Elena
CENTROS
Servicio de Neurología. Hospital Universitario Central de Asturias
OBJETIVOS
El 40% de la cefalea en racimos (CR), se cronifica, con escasa respuesta a profilaxis orales. De las tres opciones invasivas la estimulación del ganglio esfenopalatino (GEP), tiene resultados superponibles a la estimulación hipotalámica y estimulación occipital pero menor incidencia de efectos secundarios.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se revisan las historias de pacientes con CR crónica refractaria a los que se les ha implantado un estimulador del GEP (eGEP), en nuestro centro.
RESULTADOS
Se implantó un eGEP en siete varones de entre 28-69 años de edad. El tiempo desde el debut oscilaba entre 3-29 años, siendo crónico desde 3-20 años pre-implantación. En un paciente se colocó fuera de la fosa ptérigopalatina. Otro no experimentó beneficio, abandonando su uso tras 6 meses. Dos pacientes (15 meses de seguimiento), no experimentaron ninguna crisis tras la implantación aunque en uno aparecieron crisis en el otro lado. Un paciente (15 meses de seguimiento), pasó de 12 crisis/semana a 1 crisis/semana tras la cirugía. A los tres meses se ajustan los parámetros de estimulación y desde entonces una crisis mensual. Dos pacientes (12 meses de seguimiento), redujeron >75% el número de crisis semanales. Los tres pacientes que redujeron la frecuencia también disminuyó la intensidad de las crisis. Como efectos secundarios todos presentaron inflamación local leve que se resolvió en unos días, salvo uno precisó antibioterapia durante un mes.
CONCLUSIONES
La eGEP tiene efectos secundarios leves y transitorios, que la hace la primera opción entre las técnicas invasivas. Una adecuada selección de pacientes y entrenamiento quirúrgico permite obtener los resultados esperados.