COMUNICACIÓN POSTER
AUTORES
Risueño Aparicio, Marta 1; Vega Carro, Alvaro 2; Ripoll Calafat, Alba 2; Ballabriga Planas, Jordi 2
CENTROS
1. Servicio de Neurología. Hospital Son Llàtzer; 2. Servicio de Neurología. Hospital Son Llatzer
OBJETIVOS
La arteritis de la temporal es una vasculitis que suele afectar principalmente a las ramas de la arteria carótida externa, siendo una de sus manifestaciones la pérdida de visión. El ictus es una complicación poco frecuente pero potencialmente grave de la enfermedad. El diagnostico y el manejo posterior pueden plantear serias dificultades, requiriendo un alto índice de sospecha.
MATERIAL Y MÉTODOS
Presentamos el caso de un varón de 80 años que ingresa en nuestro servicio por disartria y sincopes de repetición. En la RM craneal se detecta infarto cerebeloso bilateral. El angioTC muestra inflamación de ambas arterias vertebrales con fujo filiforme. Los reactantes de fase aguda estaban elevados (PCR 34,20 mg/L y VSG 59 mm). En anamnesis dirigida comenta claudicación mandibular, somnolencia y astenia. Solicitamos ecodoppler de la temporal y biopsia que confirman el diagnóstico.
RESULTADOS
Se inicia tratamiento con corticoides. Posteriormente evolución tórpida que obliga a asociar metrotrexate. A pesar de esto presenta mala evolución que obliga a tratamiento con tocilizumab por mecanismo de acción más rápido, con lo que se estabiliza. Actualmente sin nuevas recidivas.
CONCLUSIONES
En el ictus atribuido a arteritis de celulas gigantes se ha descrito una mayor afectación del territorio posterior como es el caso de nuestro paciente. El diagnostico supone un reto ya que la biopsia es la única prueba gold standard. En la actualidad podemos apoyarnos en el eco-doppler de la temporal y PET- TAC. A pesar del tratamiento corticoideo precoz la evolución puede ser tórpida requiriendo otros inmunosupresores o incluso tratamiento endovascular.